PENSAR
Nos está acostumbrando el Gobierno a un tipo de actuar un tanto curioso. Si dudan de la eficacia de una medida lanzan unos globos sondas para otear el horizonte, y según sea la respuesta popular siguen adelante o bien echan el ancla. Quizá olvidan que parte de su trabajo es PENSAR.
Los filósofos influidos por su natural tendencia a filosofar dicen que precisamente ese acto: Pensar, es decisivo en una vida. Pensar y, para que sea útil tal ejercicio, comprometerse con el resultado pensado. Kant afirmaba que la cuestión ¿Qué debo hacer, es una de las cuestiones centrales del arte de los sabios. Resulta atractivo dejarse llevar, y no pensar en si es lo correcto, por los atractivos externos del poder, por lo que proporciones más votos, por el placer que conlleva el propio placer, o por el tan deseado dinero que puede lograr casi todo. Sin embargo, ¿estos son realmente los bienes que nos convienen?.
Siguiendo con las proposiciones de los entendidos especuladores del pensamiento, aseguran que el conocimiento es la operación más perfecta y que su plena autorrealización en el hombre, sólo se lleva a cabo por el amor. ¡ casi nada!.